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Josephine, Episodio 4, Temporada 2

Ante el silenciamiento sistemático de relatos de la otredad, Josephine canta desde el ombligo y con la convicción de que todes tienen el derecho a narrar(se). Ella es pianista y vocalista de Aguas Ardientes, la irreverente banda musical integrada también por Pepa Lopera, Tao Gómez y Sebastián Portilla, y conspirada junto a su hermano y cómplice creativo Javier Fernández.


Desafía junto a ella la cisnormatividad y acentúa el ritmo hacia una sociedad donde las personas con identidades de género diversas tengan todas las garantías para vibrar alto y dignamente.

EPISODIO 4, TEMPORADA 2
PUBLICADO EL 03/08/2024

Créditos

PRODUCCIÓN
A Todo Pulmón
 
DIRECCIÓN
Juan David Rangel Gil
 
ASESORÍA DE GÉNERO
Susan Lorena Sarmiento Alayón
 
INVESTIGACIÓN, GUIÓN, PRODUCCIÓN SONORA Y MONTAJE 
Gilmer Leandro Barrios Sánchez
 
EDICIÓN Y VERIFICACIÓN DE DATOS 
Juan David Rangel Gil
 
MÚSICA
Stefanny Quintero Arévalo, Brayan Andrés Ramírez Palomino, Josephine Fernández Córdoba, Aguas Ardientes y Majagua Ensamble
 
MEZCLA Y MASTERIZACIÓN
Brayan Andrés Ramírez Palomino
 
ILUSTRACIÓN
Féminas Ilustradas
 
REFLEXIONES FINALES
Adaptación de “Redes de Cuidado: Revoluciones Invisibles para una Vida Vivible”, de la Colectiva Etinerancias de Brasil

Transcripción

[Fragmento lírico, poema “Me Tengo”]: No eres quién me hace feliz. Me tengo. No eres quien me hace infeliz. Me tengo. Y, ¿que tengo? No sé bien, apenas me tengo sin tenerte a ti. Lo que tengo seguro es que no quiero tenerte aquí.

[Juan David]: Esto es Un Canto al Paso. Segunda temporada: Historias sonoras de música del cuidado. Soy Juan David Rangel Gil. En el episodio de hoy conoceremos a Josephine Fernández Córdoba, pianista y vocalista de la banda musical Aguas Ardientes. El poema que acabas de escuchar es de su autoría. Se llama “Me Tengo”.

[Fragmento musical, canción “Un Canto al Paso”]: Llevamos un canto al paso. Esa es nuestra bandera. 

[Juan David]: Entre verso y verso, Josephine manifiesta su orgullo de navegar un mundo binario en una cuerpa transfemenina no binaria. También sobrepasa los obstáculos que intentan desmoronarla por escoger hacerse visible en espacios donde le quieren invisibilizar. Relata sus encuentros con el gozo y el desconsuelo, con el placer y el dolor, con la creación y la destrucción. 

[Josephine]: Hay cosas que solo puedes decir y que tienen sentido cuando las dices en el contexto de un poema, por fuera de eso a veces la gente espera que tú les des argumentos, explicaciones, que tus palabras tengan una certeza y que sean sólidas. 

[Fragmento lírico, poema “Me Tengo”]: Tenerte a ti es perderme a mi. Yo al poseerte nunca fui feliz y tú sí querías tenerme siempre aquí.

[Josephine]: Y la poesía es como… tú estás diciendo palabras, pero en realidad estás haciendo sonidos, estás gimiendo. Lo siento mucho más asociado a la corporalidad.

[Fragmento lírico, poema “Me Tengo”]: Y aunque sólo me tengo a mí, pues te recuerdo que siempre te tendré aquí. Por siempre aquí, para no tener…. Pero no tener de tener, de poseer, sino de deber, de doler, de tener que sufrir, de tener que llorar, para eventualmente dejarse reír.

[Josephine]: Transitar a mí me ha permitido encontrar una voz poeta mucho más sólida y fuerte, porque siento que lo que tengo que decir ha evolucionado hacia… o me atraviesa completamente en el cuerpo.

[Fragmento lírico, poema “Me Tengo”]: Te tengo enterrada, cicatrizada, y tú también me tienes a mí. 

[Juan David]: Por el cuerpo transita su energía vital para concientizar, para sanar, para denunciar las fuerzas que condicionan lo que se puede y no se puede decir. Pero el deseo de expresarse libremente no es suficiente sin los mecanismos para generar espacios diversos, equitativos y justos para la escucha. 

[Josephine]: Yo creo que sobre todo lo que es más difícil y lo que tenemos que empezar a incorporar hacia futuro son esos relatos que de verdad necesitan que se hagan como unos ajustes razonables para ser escuchados. Quienes no tienen acceso a los medios tecnológicos sí están quedando muy relegados y se está generando una brecha fuerte entre quienes pueden enunciarse y quienes están siendo enunciados constantemente.

[Juan David]: “¿Quién narra la historia?” Es un cuestionamiento importante sobre las historias que escuchamos. ¿Cuáles son las intencionalidades, las posturas, los tratamientos detrás de una historia? No la contará igual quien la vive a quien la observa. 

Este planteamiento no demerita los esfuerzos de acercamiento hacia las experiencias ajenas a las nuestras. El llamado es a hacerlo con sensibilidad, responsabilidad y respeto por la dignidad. Y más allá de esto: es a promover la apertura de caminos para que haya más narrativas periféricas y disidentes. Pensemos, por ejemplo, en las barreras para las personas privadas de la libertad.

[Josephine]: Vivimos una lógica punitivista muy fuerte en Colombia, y precisamente por eso las personas que están privadas de la libertad pierden el derecho a doler, el derecho a que se sienta empatía por elles. O también el derecho a crear, el derecho a surgir dentro de la sociedad.

[Juan David]: Discriminación, olvido, prejuicios y estigmas ahorman los imaginarios sociales sobre las personas privadas de la libertad y otras personas en situación de vulnerabilidad. Las imágenes y narrativas hegemónicas monopolizan la realidad, vendiéndonos una “verdad” que les caracteriza como personas indignas de ser humanas, que solo existen como una sub-clase. 

Hay múltiples verdades, relatos y experiencias de vida. Esto lo reconoce Josephine desde su privilegio.

[Josephine]: Pues es un oximorón decir que soy una mujer trans privilegiada, pero lo es, o sea, soy. Y toda la vida he encontrado más empatía hacia los relatos de las personas que han sido excluidas.

[Juan David]: Las identidades sexodisidentes tienen derecho al futuro, tanto a narrarlo como vivirlo, pero ¿cómo imaginar otras posibilidades si constantemente las sociedades pretenden negar su poderosa existencia, una re-existencia que rechaza la fiscalización del género y aboga por las desnormativización de las cuerpas? 

[Josephine]: ¿Qué futuro les espera a las personas como yo?  Entonces por ese lado sí creo que no es por mí, no es por mi futuro, pero sí es por el futuro de quienes son como yo, que vengan en el futuro. Las nuevas personas trans, las nuevas personas dedicadas al arte. Hay emociones también que han surgido obviamente con explorar los límites de esta feminidad trans. Sí quiero, sí materno futuros para mis compañeres. Me importa el futuro de otros.

[Juan David]: Hacer valer el futuro de les otres es hacer valer también nuestros propios futuros. Es revolucionario hacerlo, pero no desde la instrumentalización, el extractivismo o el colonialismo narrativo. Sino desde la amistad y la escucha, imaginando y construyendo realidades dignas con la colectividad, las colectividades.   

La forma cómo convivimos con el futuro es variable. Sin embargo, los  constructos esencialistas pretenden negarnos esa posibilidad de ser seres cambiantes. Incluso las memorias corporales, sensoriales y lingüísticas de una persona tienen dinamismo. Responden a las interpretaciones de la realidad y a los tránsitos, las exploraciones, las búsquedas que hacemos para relacionarnos con la diversidad del entorno. 

[Josephine]: Mi relación con el pasado es muy diferente hoy en día, después de haber tenido un tránsito de género al que habría sido hace nada. Como que… es otra persona, con otro nombre, con otras experiencias. Han habido momentos donde mi pasado me genera angustia, me genera rabia; donde estoy atrapada en ese pasado. Y también como que poder aceptarlo y aceptar que ese sí es mi pasado también me permite soltarlo y como fluir más hacia hacia el presente y lo que sea que es el futuro.

[Juan David]: Soltar, renunciar o hacer las paces con el pasado es una decisión personal, donde a veces ni el tiempo ofrece pistas sobre qué camino coger. Josephine ha acudido a la música para conversar con ese pasado.

[Josephine]: Yo creo que yo era muy buena jugando en el rol de ser un machito típico, machito beta; Alfa no, jamás. Pero sí un machito con muchas inseguridades. Porque ese es el problema: los machos son machos para ellos. Es como una cultura ascética, una cultura de pureza. Todo lo que no puedes hacer para ser. Y si llegas a  ser cualquiera de esas cosas, dejas de ser hombre, dejas de ser macho. Las experiencias que vivimos siendo un grupo de machos, fueron muy… digamos que no las puedo borrar de mi cuerpo. Y hoy en día son casi que violencia ejercida por mí misma hacia mí misma.

 [Fragmento musical, canción “_Una más”]: Caminando borracha por la calle, gritándole a chicos desconocidos que si no quieren que los morboseen porque se ponen faldas tan cortitas. Mis amigos reían orgullosos, entretenidos por mi insolencia. ¡Cuánto tardé en aprender que pa’ violar no hace falta violencia!

[Josephine]: He cambiado mucho de ese macho a hoy en día. Y todavía le pido perdón a las mujeres, sobre todo a mí misma. Todavía me tengo que perdonar a mí misma como no haber protegido más la feminidad. No haber sido más sonora con mis hermanas y conmigo misma. Por más mujer, por más mujer mujer que me vuelva, seguiré cantando esa canción y sintiendo cosas muy parecidas. También es una limpieza que uno hace al mencionar esas cosas. Y para violar no se necesita violencia, solo se necesita… indolencia.

[Fragmento musical, canción “_Una más”]: Aprendí de esta experiencia que pa’ violar no hace falta violencia.

[Josephine]: Tanto ser el macho como ser el típico marica también es una identidad construída, atravesada por esas representaciones culturales que tenemos del macho y de la marica. Entonces yo dentro de las maricas poco me recogía, pero sí me recogía en todos los alienígenas, todas las personas extrañadas, los deformes, los monstruos. Me encantaban los elfos y me encantaban todas estas criaturas que eran muy fluidas dentro de su masculinidad. Pero lo que sentí yo fue como mucha violencia al tratar de habitar ese cuerpo y yo no podía con la violencia. He tenido ciertas experiencias muy profundas de violencia que me han marcado como en el sentido de… no quiero vivir más violencia, no quiero, no quiero recibirla y probablemente si me la halas, sale.

[Juan David]: Cualquier discurso o acción que monitorea, reprime o suprime a los cuerpos, es violento. Por eso, abrazar la identidad tal cual como uno, una, une decida construirla es tan transgresor como transformador.

[Josephine]: Desde el día que te empiezas a reconocer, cada día eres más marica. Entonces todos los días me despierto más feliz. Hasta voguié el otro día. O sea, empiezo a fluir más en ese mundo. 

[Juan David]: La mariconería punkera, ñoña y activista de Josephine ahora le permite expresarse en formas que antes no hacía porque estaba cisnormada. 

[Fragmento musical, canción “_Una más”]: Le pido perdón a las mujeres. Llevo toda esta mierda en mi conciencia.

(Fragmento musical, canción “La Balada del Duende del Transmilenio”)

[Juan David]:  Desde Aguas Ardientes, la banda de Josephine, elle también desobedece a los estándares del género. Pueden ser la banda más punk del pop o la más pop del punk o todo lo demás. 

[Josephine]: Mi afán creativo me lleva a mezclar cosas como el irlandés y la cumbia en “El Duende”. Creo que el género es de las cosas que menos me importa. Es algo que le importa mucho a la industria para encasillar quiénes pueden tocar, en qué franja, en qué escenario van a tocar los rockeros, en qué escenario van a tocar los que hacen pop.

[Juan David]: A Josephine la energiza encontrar conexiones inesperadas dentro de la música. De ahí que el género de Aguas Ardientes no le importe tanto. Más bien, le interesa que el público se rebeldice con elles, se cuestione su placer, se desmarque de los dispositivos de control y cante libremente desde la lógica de que lo personal y lo colectivo es político. 

[Josephine]: Pues yo diría que hemos evolucionado hacer ser más trans, más género fluido. Yo entiendo la identidad de género; hablando puntualmente de ser hombre, ser mujer, ser no binaria; como un constructo social y como una realidad que es como interior. Depende, si tú crees en la astrología, entonces mira mi carta astral y vas a ver que yo soy más 70% femenina que masculina. Si tú crees en la psicología, podemos hablar de que yo tengo una subjetividad, un sexo subconsciente; que toda la vida he sentido, me he sentido dentro de una feminidad. Médicamente hablando, pues no, no patologicemos mi existencia. Pero también hay formas de hablar de lo que yo soy desde lo médico.

Yo decidí, me convertí y viví y de tanto vivir como mujer me volví mujer. O sea, lo que te hace ser un género es una construcción que tú haces. Pero también me identifico como no binaria en el sentido de que no estoy amarrada a seguir… no tengo un ideal al que estoy persiguiendo de feminidad eterna y como que allá está mi punto final. Yo considero que ya juego entre las dos.

[Juan David]: Josephine encuentra paralelismos entre su transición personal y la transición de su banda. Con Aguas Ardientes juega entre géneros musicales aparentemente opuestos, accediendo a espacios masculinizados para reivindicar el transfeminismo. El público de un concierto perfectamente podría decir: “convirtieron una canción contracultural y cruda en un himno autóctono y representativo colombiano”.

[Josephine]: O al revés, ¿no? Es una canción de cumbia y la volvieron punk, y se siente chévere. Entonces se crea una nueva posibilidad.

[Juan David]: El proyecto musical de Josephine es un catalizador de las heridas del país. Aborda la indignación y el dolor de los atropellos sistemáticos hacia la otredad. Pero elle no se queda solamente llorando sobre la leche derramada.

[Josephine]: La rabia se traduce en burla y se traduce en chiste y como que eso evoluciona a poder decir: “Ay, ustedes creen que todo es culpa de la bareta”, “Si yo pudiera, yo me mato a estos cinco malparidos”, “Si yo fuera Dios, todos tendrían pene y vagina”. El absurdo para mí es una herramienta muy poderosa para mostrar cuán ridículas a veces son nuestras creencias.

[Juan David]: Con una intención antisistémica, anticapitalista y antipatriarcal, Josephine performativiza la gente de bien, asumiendo la voz de quienes políticamente detesta como el maltratador, el paraco, el corrupto, el xenófobo.

[Fragmento musical, canción “Orinoco”]: Mira cómo roban los venezolanos. Mira cómo matan los venezolanos. Mira cómo mienten los venezolanos. Si uno no supiera, diría que son colombianos.

[Juan David]: Más allá de presionarse a mover masas hacia la transformación del mundo como una responsabilidad social, Josephine lleva un canto al paso para ambientar las conversaciones cotidianas sobre temas que afectan nuestras vidas y derechos, así sean incómodas.

Tal es el caso de la canción “Orinoco” que denuncia una de las tantas agendas violentas del Estado, pero convenientemente camufladas en nacionalismo, consumismo y colonialismo.

[Josephine]: Sí sentí que hay una conversación que se dió. Dentro de una lógica donde Colombia todavía creo que es muy… le cuesta mucho hablar de su racismo y de su xenofobia. Y enunciar todo eso en Orinoco creo que nos ha ayudado a… como al menos a dar un mensaje de aliento.

[Juan David]: En solidaridad con las existencias subalternizadas, ella acuerpa con su voz. 

[Música: Orinoco – Aguas Ardientes]: Miren a Maduro cómo los oprime, si fuera de derecha parecería Uribe. Allá toa’ la plata se la lleva Maduro, acá toda se la lleva Sarmiento Angulo.

[Juan David]: Pero reconociendo el llamado a seguir derribando fronteras mentales, Josephine ofrenda el canto como un pedido de perdón en nombre de quienes carecen de empatía. No sin antes resaltar que no todas las personas somos desconsideradas…   

[Josephine]: …Pero también sufrimos y somos el río de nuestra fuente. El río nace de nuestra misma fuente y por ese mismo río fluye ron y aguardiente.

[Fragmento musical, canción “Orinoco”]: Nos hicieron olvidar que somos la misma gente porque un pueblo dividido es mucho más obediente. Dividir es la estrategia  de la clase dirigente. Y no vamos a olvidar que en verdad somos parientes, que el río de nuestros ancestros nace de la misma fuente. Y en ese río fluye tanto ron como aguardiente.

[Juan David]: Respirar dignidad moviliza las mentes y los cuerpos. A veces en forma de la digna rabia, tumbando monumentos que simbolizan opresiones y violencias. Y a veces en forma de la digna risa. Ambas como motores del cambio social apelando a la indignación justa y ética.

[Josephine]: Entonces yo siento que la digna risa no sería una risa que se aproveche de las diferencias que tenemos los seres humanos y como que las recalque. Y no es el cinismo y el sarcasmo con el que a veces nos atacamos solamente por reírnos. La digna risa es cuando tú usas esa arma para causas nobles. Como que si creo que cierta resistencia y en cierta acción directa, pero no con balas. O sea, puede ser muy efectiva la risa. Entonces quienes quieran usar su astucia para desarmar al oponente, me parece que son de admirar.

[Fragmento musical, canción “Luka”]: Quiero ir para un restaurante…

[Juan David]: Así pasa, por ejemplo, con “Luka”, una canción que se burla de no tener plata.

[Fragmento musical, canción “Luka”]: …Pero no tengo la luka. No hay luka para ni mierda. Si tú te quedas conmigo, no puedes estar muy cuerda porque yo soy un vaciado, soy un vaciado de mierda. No tengo luka pa’ ni mierda.

[Juan David]: El humor también muta a través del tiempo.

[Josephine]: Sí siento que el humor pasa por una maduración. Hay canciones que ya no tocamos porque no nos parecen chistosas y nos parecen inclusive violentas.

[Juan David]: Aunque hay canciones cuyos chistes ya no le generan risa a Josephine, elle prefiere no borrarlas del historial digital como un testimonio de aquello que le daba risa en cierto momento. Esto lo hace para deconstruirse, para permitirse errar, para no autocensurarse, y porque esas posturas pueden servir al debate constructivo, incentivando que reflexionemos sobre nuestras incoherencias, nuestros contrastes, nuestros vacíos, porque el hecho no es convertirnos en personas ejemplares, perfectas y puras, sino más humanas, más reales, más auténticas; siempre guiadas por el respeto. 

Josephine tiene canciones para no volver a tocar, para reír, para reconocernos en la otredad, para fusionar géneros, para mirar hacia adentro y para admirar lo cotidiano.

[Fragmento musical, canción “Tamales”]: Muy temprano escuché un canto en la lejanía: ¡Tamales! ¡Tamales! El señor que los domingos me trae la alegría…

[Josephine]: Me recojo mucho en un gran antropólogo que se llama Michael Pollan que habla de: En una sociedad donde cada interacción ha sido convertida en una transacción capitalista, como que el acto de cocinar es un acto revolucionario.

[Música: Tamales – Aguas Ardientes]: …¡Tamales! Y bajé tranquilamente a la portería.¡Tamales! ¡Tamales!

[Juan David]: Lo cotidiano es político: la pereza, el descanso, las ganas de comer, saber que unas personas están aquí y otras allá. Josephine reconoce que cocinar puede ser un privilegio. Pero a ella la centra poder compartir la felicidad y el placer con otres. Desde las revoluciones cotidianas genera incidencia. También desde las revoluciones públicas, que antes realizaba desde la calle y que ahora hace desde la Plataforma de la Ley Integral Trans Ya, a la que se vinculó por varias razones.

[Josephine]: Primero porque soy una persona no binaria trans cuya vida está atravesada no solo por la discriminación, sino por un montón de huecos en los que yo termino porque la sociedad no ha terminado de comprender y asimilar nuestra existencia. Entonces, a nivel personal por mí. Yo quiero poder vivir tranquila, pensionarme, tener los mismos derechos que cualquier otra persona y no los tengo en este momento porque la sociedad requiere ese reconocimiento. Y también es un tema de juntanza y de hermandad. Nadie realmente me acompaña tanto como elles. Yo llegué allá por mí, llegué allá por mi interés por la población; me quedé porque encontré una comunidad que me abraza y me respeta y me reconoce. Y ahora son mi todo.

[Stefanny Quintero Arévalo]: La autoprotección territorial es la capacidad de actuar en conjunto en la protección de nuestros territorios y nuestros derechos. Esta inteligencia que brota entre las brechas por medio de la auto-organización tiene el potencial de crear una diversidad de estrategias y caminos. La defensa de sí misma, de las mujeres y de las prácticas impulsadas por ellas, adquiere el mismo peso que las prácticas de defensa territorial, siendo ambas, por tanto, formas de autoprotección. La autoprotección es la condición colectiva de colocarse como sujeto estratégico frente al entramado de una multiplicidad de contradicciones políticas y es, fundamentalmente, una forma de cuidado.

Los procesos de autoprotección permiten enfrentar los riesgos, las vulneraciones y las amenazas hacia los derechos humanos, ya sea frente a las acciones del Estado o al ataque de mega-emprendimientos u otros opresores. De esta manera, las articulaciones se enfocan en el desarrollo de mecanismos de protección, de tácticas de fuga y de sigilo, de estrategias para viralizar informaciones por redes de comunicación y muchos otros caminos para lograr objetivos comunes donde priman el respeto por la agencia, la territorialidad, la diversidad y el cuidado de todos, todas y todes. Para dialogar con la vida y la dignidad de las personas, la política debe pasar por lo cotidiano y responder a las necesidades personales y colectivas.

Aquí termina este episodio de Un Canto al Paso. Soy Stefanny Quintero Arévalo. Las reflexiones finales que les compartí son adaptadas de “Redes de Cuidado: Revoluciones Invisibles para una Vida Vivible”, una publicación de la Colectiva Etinerâncias de Brasil.

Un canto al paso es producido por A Todo Pulmón y dirigido por Juan David Rangel Gil. La asesoría de género es de Susan Lorena Sarmiento Alayón. Juan David realizó la entrevista y Gilmer Leandro Barrios Sánchez, la investigación, la producción sonora, el guión y el montaje. La ilustración es de Féminas Ilustradas. La musicalización, mezcla y masterización son de Brayan Andrés Ramírez Palomino. Josephine Fernández Córdoba, Aguas Ardientes y yo compusimos e interpretamos las canciones originales que ambientan este episodio. 

Este proyecto participó en el #NewMediaLab de #NarrarElFuturo: Festival de Cine & Nuevos Medios.

[Fragmento musical, canción “Un Canto al Paso”]: Llevamos un canto al paso. Esa es nuestra bandera. 

[Stefanny]: ¡Gracias por escucharnos!

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